miércoles, 14 de febrero de 2024

La suerte está echada en Rafah, último refugio de Gaza.

 

Ya no hay transacción posible entre Netanyahu y Biden: o continúa la violencia destructora sionista de Israel o se abre paso la razón pactista para evitar un previsible genocidio en la Franja de Gaza. Esto se da tras el fracaso de la reciente visita del secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, con el primer ministro Benjamín Netanyahu en Jerusalem, el pasado 7 de febrero, para tratar la situación de la guerra en Gaza. Es por ello que en los últimos días, tanto la ONU como EEUU han manifestado su preocupación ante una posible expansión de la ofensiva terrestre del Ejército israelí sobre Rafah, un territorio fronterizo con Egipto y último refugio en el que malviven evacuados más de un millón de palestinos gazatíes que llevan cuatro meses escapando de los mortíferos bombardeos y combates del resto del territorio palestino. En este sentido, Vedant Patel, portavoz adjunto del Departamento de Estado Americano, en una rueda de prensa celebrada el pasado jueves, ha manifestado su inquietud y perturbación ante la esperada operación israelí sin una adecuada planificación y poco meditada, ya que previsiblemente supondrá un gigantesco desastre humanitario. No obstante las posibles consecuencias, Benjamín Netanyahu no cede y ha hecho oídos sordos a los llamamientos de los Estados Unidos y la comunidad internacional, que intentan evitar la terrible tragedia que puede suponer la intervención militar israelí. No debe extrañar la decisión de Netanyahu, pues el ministro de Defensa Yoav Gallant, ya había hecho varias alusiones en la última semana de que Israel avanzaría hacia Rafah, cuando terminara sus acciones en Jan Yunis, fortaleza de Hamás en el sur de Gaza. En este contexto, la ejecución militar masiva sobre Rafah, de ser llevada a cabo, como probablemente parece que va a ocurrir, requiere la evacuación previa de la población civil de las zonas de combate; pues según el derecho internacional humanitario, el bombardeo indiscriminado de zonas densamente pobladas puede constituir un crimen de guerra. Y, en consecuencia, la intensificación de las hostilidades en Rafah en las actuales circunstancias, podría provocar la pérdida de vidas de civiles a gran escala. Tal vez por esta razón, Netanyahu ha pedido al Ejército y a los dirigentes militares que presenten al gabinete de guerra un plan dual, tanto para la evacuación de la población civil gazatí como para la disolución de los batallones de Hamás que, según el jefe del Ejecutivo, quedan en Rafah, aunque no se ha aportado ninguna prueba de ello.

 

De momento, las hostilidades continúan e Israel ha comenzado a lanzar algunos ataques aéreos que se enmarcan en la ofensiva del Ejército israelí contra el citado enclave de Rafah, donde en la madrugada del jueves al viernes han muerto otros 107 palestinos, elevándose la cifra de fallecidos desde el comienzo de la guerra a 27.947, de los cuales 12.000 son niños, además de otros 67.500 heridos. A este respecto, contabilizando los últimos gazatíes muertos, se puede afirmar que Israel ha matado hasta la fecha, a algo más del 1 % de la población de la Franja de Gaza. Me pregunto qué pasaría si Hamás, en su acto terrorista del pasado 7 de octubre de 2023, hubiera matado al 1 % de la población de Israel. Desde mi punto de vista, ya no caben equidistancias ni ejercicios melifluos ni dobles raseros. Habría que acabar con la masacre de manera inmediata y darle al pueblo palestino una mínima esperanza de futuro con un Estado independiente y soberano. Sin embargo, nada se hace y lo más aterrador de todo esto, es la cobarde respuesta internacional, la comedia de emitir una orden de arresto de la Corte Penal Internacional contra Putin por su invasión de Ucrania, pero no realizar nada ante la barbarie que está perpetrando Netanyahu en Gaza.

 

La actitud del Gobierno de Netanyahu es despiadada y reveladora de sus intenciones, ya que desde el primer momento han impedido que haya prensa internacional independiente en la Franja de Gaza. De esta manera, con un feroz apagón mediático, todos los horrores inimaginables que viene cometiendo el ejército israelí, han podido esconderse o al menos logrado que no hayan tenido un gran impacto en la opinión pública internacional y en la del propio Estado de Israel. De hecho, en un ejercicio de repugnante cinismo, la Corte Suprema israelí rechazó un recurso de la Asociación de Prensa Extranjera en Jerusalén que demandaba que Israel autorizara acceso a los periodistas a Gaza. El tribunal rechazó la petición con un fallo en el que reconocía, nada menos, que la violación de la libertad de prensa; pero argüía que su rechazo estaba justificado por motivos de seguridad. Y, además, en el colmo de la desfachatez, indicaban estar preocupados por los reporteros en Gaza; ya que podrían correr riesgos en tiempos de guerra.

 

Todo lo que está pasando en Gaza y lo que todavía pueda llegar a ocurrir entra plenamente, a mi modo de ver, en el significado de todas las variantes de la definición de genocidio, incluida la deportación masiva de la población gazatí de su legítima tierra. Otra cosa es que en Occidente, sometidos como estamos a la propaganda y manipulación masiva por la mayoría de los medios de comunicación, nos tapen los ojos para que no veamos lo que está a plena vista, pero si algún día salimos de esta situación de esclavitud moral, veremos con horror todo lo que defendimos. La suerte está echada…

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

13 comentarios:

  1. La suerte estaba ya echada el ocho de octubre y acaso muchos años antes. La inoperancia de ONU es total. Y la posición de USA, criminal. La de occidente, en conjunto, vergonzosa.
    Te corregiría, no sé si a ti o al americano, lo de desastre "humanitario"; aunque se vea mucho, yo lo de humanitario lo aplico a la actitud de ayuda a las víctimas.
    Como siempre, agudo pensador y buen escritor. Te felicito.

    Un abrazo,
    Pepe

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  2. Hola Juan Antonio,
    Me parece muy bien y oportuno que utilices las letras para seguir poniendo acento sobre esta barbarie de muerte y destrucción. Será cuando desaparezcan por fin los desalmados dirigentes que la han propiciado y la herida se haya hecho más profunda y sin solución con el paso del tiempo, será entonces la reacción occidental de llevarse las manos a la cabeza y también hora de pagar las consecuencias. Muy pesimista.

    Un abrazo,
    Miguel Ángel

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  3. Yo no pierdo la esperanza . Parece que están reunidos y hay motivos para pensar que van a conseguir unas semanas de alto al fuego . En ese tiempo espero que se consiga dar a los gazatíes tierra y moral para reconstruir su pueblo. Pero , Juan , es que hay un problema , que es Hamás .

    Carmen

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  4. A ver como termina toda esta horrible masacre.
    Buenas noches.
    Un abrazo,
    Antonio

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  5. Como Siempre, das en el clavo, querido tío.

    Un abrazo,
    Eduardo.

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  6. Yo creo que a estas alturas no hay nadie que no sea consciente de la barbarie perpetrada. La respuesta de Israel hubiese sido la misma o hubiese actuado de la misma manera tanto si hubiesen eliminado al 1% d su población como la que están dando. Recuerdo que cuando se produjo el ataque de Hamás pensé: No saben lo que han hecho. La que se va a formar....y desgraciadamente así ha sido.

    Buenas noches,
    Magda Sellarés

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  7. Juan Antonio, he empezado a leer tu artículo y no lo he podido terminar. A mi edad estos conflictos que padecen el pueblo llano, me afectan mucho anímicamente. Por el mismo motivo no visite Auswitch. Lo siento.

    Encarna

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  8. Gràcies per aquest article que ajuda a entendre i denuncia la situació dels palestins. Per lo que expliques, el seu futur es molt negre.
    La prepotència de Netanyahu amb persones indefenses es aberrant.

    Ton.

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  9. El artículo es la descripción más cruda de la realidad, de la que todos nos sentimos culpables y avergonzados por mantener unos gobiernos que se tapan los ojos por mandato del amo americano. Confiemos en que la historia ponga a esta gentuza ante el espejo de lo que son, unos genocidas sin escrúpulos, cobardes y miserables, me faltan calificativos para expresar lo que siento por ellos al permitir que la humanidad tengamos el corazón a cien por hora, destrozado y secuestrado por su inmundicia razón de Estado. Asesinos de todo ser vivo, donde su sepultura son los escombros de sus moradas, que después las máquinas excavadoras aplanan como si de campo muerto se tratara. Malnacidos y espero que peor muertos.

    Santiago Méntrida

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  10. Ya pareces un periodista destacado a la zona de guerra. Eres muy libre de hacer y escribir sobre los temas que te creas más interesantes y ocurre que aportando datos nuevos los argumentos se repiten, o sea los y las lectoras que te siguen saben tu opinión, saben lo que tu piensas y al añadir información actualizada más que un artículo de opinión parecen las noticias de, como digo, un periodista allí destacado. Evidentemente lo que comento es una cuestión formal, por otro lado el articulo está muy bien escrito con un relato muy bueno. Yo de ti, pero es una opinión personal, cambiaría unos días de tema, tendrás tiempo de volver sobre esta guerra. Sería interesante, si sabes de amigos y amigas que te siguen que les preguntases que opinan de tocar muchas veces en poco tiempo el mismo tema, puedes hacer un sondeo para saber que opinan.

    Un abrazo.

    Ramón

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  11. Hola Juan Antonio, Debo decirte que sin duda estas en lo cierto de que la suerte de los palestinos en Rafah esta echada, no hay duda que la suerte de este pueblo no le preocupa en absoluto a Israel, ya que la venganza y la liberación de los rehenes es su único objetivo. Tampoco cabe duda de que los países occidentales protestan con la boca pequeña, para no disgustar al poderoso lobby sionista, que siempre esgrime que es el pueblo que ha sufrido un genocidio histórico de mayores proporciones, solo la Shoah, supuso la eliminación de 4 millones de judíos, efectuada de un modo sistemático, algo más que todos los palestinos de Gaza, y con este sentido de culpabilidad histórico los países occidentales no se atreven a frenar a su pueblo protegido.
    Cada generación tiene que soportar sus vergüenzas históricas y desde luego la nuestra no se liberará, queda patente a tenor del desarrollo de los acontecimientos actuales.
    Un cordial saludo.
    Jordi

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  12. Muy bien, Juan Antonio. Vuelvo a suscribir lo que te dije en tu último artículo.
    ¡Qué vergüenza!
    Un abrazo.
    Jaime

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Gracias por tus comentarios.