Estoy
irritado. Lo expreso de forma clara, explícita. El presidente Rajoy, con una
prepotencia que me parece a todas luces insultante, nos deleita con variadas
perlas de su pensamiento. Me resulta inaudito que, con más de seis millones de
parados, no tenga el menor pudor en reafirmarse una y otra vez en sus tesis
económicas e intente convencernos de que todo el mal le es ajeno; pues, tomando
a la ciudadanía por imbéciles, justifica los errores que realiza su Gobierno con
en el mantra de la herencia recibida….Con estupor veo, oigo y leo sus
declaraciones en Loja:
- “Hemos hecho unas previsiones conservadoras para ser creíbles. Pero las hemos hecho con el objetivo de superarlas y de que vayan mucho mejor.
- “Se trata de que todos trabajemos para revisar las previsiones a mejor, para cambiar esas previsiones que hicimos el viernes”
- “Es mejor decir la verdad que hacer castillos en el aire”.
- “Podíamos haber hecho otras previsiones, pero creemos que es mejor explicar la realidad, que decir otra cosa y que luego tengamos que contar que ha habido un millón de parados más de los previstos. Eso no es jugar limpio con los ciudadanos, y por eso no lo hemos hecho”.
- “Las cosas pueden ir mucho mejor. Igual que las cosas este año han ido peor para Europa de lo que se esperaba, ¿por qué no podemos duplicar el crecimiento que hemos previsto? Ya veremos”.
- “No voy a hacer ningún cambio en el Gobierno. Estoy muy satisfecho del trabajo que están haciendo los ministros del área económica y los demás, de su esfuerzo, coraje y pundonor en medio de la mayor crisis económica en muchos años que además coincide con una recesión en la zona euro que es adonde hacemos el 60% de nuestras exportaciones. Este proceso no es fácil, lleva su tiempo y los resultados tardan en verse”.
- “Soy plenamente consciente de que estas previsiones pueden frustrar a mucha gente, los anhelos, los deseos, los sentimientos de muchas personas. Pero quiero decirles que el Gobierno sabe lo que hace, y pronto empezaremos a crecer”. “El Gobierno sabe adónde va, hay que tener paciencia y ser perseverantes”,
Por supuesto
que en sus manifestaciones, desde el año y medio en que lleva gobernando, no ha
salido nunca de su boca esa mítica frase que hasta el Rey nos dijo: “Lo siento, me he equivocado. No volverá a
ocurrir”
¿Qué tiene
este hombre en la cabeza? – me pregunto - . Solamente se me ocurren dos
posibles respuestas:
Una.- Como nos
decía el obispo y filósofo San Agustín, ignorancia: “¡Ay de mí que ni siquiera sé lo que no sé!”·
Otra: Que
padece holoacrania, esa severa y conocida anencefalia.
Ambas
respuestas se parecen y guardan un cierto grado de correspondencia. Recuerdo
que esto ya lo decía un asistente sevillano de mi padre: ez lo mismo, pero no es iguá….
Sin acritud.
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